Aunque sea costumbre de EU, siempre me ha gustado mucho este festejo. Pude festejarlo el año que viví en Rhode Island y como que me lo tomé muy en serio porque engordé 4 kilos en 4 días.
Pero fuera de toda la comida deliciosa, la decoración y las hojas naranjas en todos los jardines creo que lo mejor de esta fiesta es el significado.
Siempre tenemos algo por lo que estar agradecidos, empezando con estar vivos y creo que es muy importante para todos hacer este ejercicio aunque sea una vez al año.
Personalmente me gustaría agradecer este año por un cambio que tuve, en que finalmente me pude dar cuenta de todo lo que quería hacer y de cual camino me iba a llevar ahí.
Aprendí que quiero ser infinitamente feliz y vivir mi vida en cada momento, que no iba conformarme con “estar bien y cómoda”. Que para ser feliz me iba a costar trabajo, pero me iba a quedar con muchísima paz. Doy gracias por esta paz.
– María
-CHECKLIST®
“Great things never came from comfort zones”